Un taller ilegal es un modelo de negocio fraudulento a través del cual locales sin licencia ofrecen servicios de reparación y revisión de vehículos.
Estos negocios no poseen permisos reglamentarios, acceso a la información técnica de los vehículos ni ninguna de las licencias y autorizaciones que marca la legislación vigente. Los establecimientos clandestinos tampoco cumplen las normativas en materia de seguridad laboral o gestión medioambiental de los residuos y no emiten factura por sus servicios.
A pesar de no existir cifras oficiales, CETRAA (Confederación Española de Reparación de Automóviles y Afines) calcula que un 20 % de los talleres operativos actualmente en nuestro país trabaja sin las licencias pertinentes. Una situación agravada por la crisis económica, que ha llevado a muchos consumidores a acudir a estos talleres fraudulentos, atraídos por sus precios más bajos, sin ser plenamente conscientes de las consecuencias.
Reparar en talleres clandestinos tiene graves consecuencias para la seguridad vial de su vehículo y atenta contra sus garantías y derechos como consumidor, además de ser una práctica penada por ley.
Los talleres legalmente establecidos son los únicos talleres que:
– Poseen la maquinaria necesaria y las herramientas adecuadas para realizar las reparaciones.
– Tienen acceso a la información técnica del vehículo.
– Utilizan únicamente piezas homologadas y recambios cuya trazabilidad está asegurada.
– Garantizan las reparaciones que realizan al emitir la factura correspondiente.
– Proporcionan formación continua a sus empleados.
Por todo ello, sólo los establecimientos legales pueden garantizar la correcta manipulación del vehículo, lo que redunda en una mayor seguridad vial al reducir el riesgo de accidentes.
Cuando tengas un problema con tu vehículo, no te la juegues ¡pídenos cita previa a nuestro servicio de taller 100% legal!