1. Llevar el mantenimiento de tu vehículo al día: revisar los niveles (aceite, agua, refrigerante, líquido de frenos y demás líquidos del coche), así como asegurarte que los neumáticos están en buen estado y su perfil respeta el mínimo establecido (1,6 mm).
2. Asegurarte de que la rueda de repuesta está en buen estado por si tuvieras que cambiarla. En caso de no disponer de rueda de repuesto porque tu vehículo solo cuenta con un kit repara pinchazos, éste debe estar en buenas condiciones y listo para ser usado.
3. Llevar agua y aceite de repuesto en el coche es también una buena idea en épocas como ésta.
4. Comprueba la carga de la batería. No hay nada peor que quedarse tirado por culpa de la batería, así que asegúrate de que ésta está cargada para evitarte dolores de cabeza innecesarios.
Siguiendo estos consejos y planificando correctamente tus trayectos, evitarás contratiempos no deseados en vacaciones.