El equipo Nissan de LMP1 ha completado cuatro jornadas de test intensivos en el NCM Motorsports Park de Bowling Green en Kentucky, EE.UU. Después de hacer las delicias de los aficionados en la primera cita de la temporada del Campeonato del Mundo de Resistencia de la FIA con dos maquetas del prototipo, el Nissan GT-R LM NISMO volvió a salir a la pista para esta importante prueba.
Marc Gené, Harry Tincknell, Michael Krumm, Max Chilton, Jann Mardenborough y Alex Buncombe fueron los encargados de subirse al coche en Kentucky, donde la prioridad era acumular kilómetros y empezar a configurar el prototipo para Le Mans.
El NCM Motorsports Park fue elegido ya que tiene curvas que imitan las distintas secciones del Circuito de Le Mans, tal y como explicó Darren Cox de NISMO. «Este trazado fue un gran hallazgo, ya que ahora tenemos una muy buena idea de cómo irá el GT-R en la recta de Mulsanne o la chicane PlayStation. Además, esta pista tiene su propia versión de las curvas Porsche, en cuanto a grado de la curva no por la topografía, por lo que era el lugar ideal para llevar a cabo el test».
El equipo pudo elegir la configuración del circuito para las pruebas, pero por desgracia no pudo controlar el clima. Las lluvias torrenciales que cayeron en Bowling Green significan que Nissan tendrá una gran ventaja si llueve en Le Mans el próximo mes de junio.
«El test fue bien», comentó Tincknell, que hizo la mayor parte de los kilómetros al volante. «Logramos dar algunas vueltas en seco en la primera mañana, pero desde ese momento fue mayoritariamente con el asfalto húmedo. El coche funcionó sin problema y cada día aprendimos muchas cosas. Descubrimos mucho acerca de los neumáticos Michelin de agua, especialmente por la medida de nuestras ruedas traseras, por lo que nos fue muy útil».
El enfoque de los test de la pasada semana era sumar kilometraje con el coche y continuar el proceso de reglajes. El GT-R es un coche de carreras completamente nuevo, por lo que conlleva un arduo trabajo al equipo en esta etapa tan inicial a la hora de realizar la puesta a punto. El equipo contó con un prototipo de LMP2 con motor Nissan en el test para validar el trabajo que se había realizado en términos de establecer puntos de referencia en la pista y el rendimiento de los neumáticos. Todo esto se llevó a cabo bajo la atenta mirada del COO de NISMO, Motohiro Matsumura, que quedó satisfecho del progreso mostrado.