“La planta de Nissan en Barcelona está preparada para fabricar el vehículo del futuro”, ha asegurado Frank Torres, Consejero Director General y Vicepresidente de las Operaciones Industriales de Nissan en España, en su participación en el 30º Encuentro del Sector de la Automoción que organizan conjuntamente IESE y KMPG. Según Torres, este vehículo del futuro es el que responde al “doble cero: cero emisiones y cero accidentes”, objetivo que será posible gracias al vehículo eléctrico y al vehículo de conducción autónoma.
“Actualmente, la fábrica de Nissan en la Zona Franca ya está fabricando vehículos eléctricos; la furgoneta e-NV200 lanzada en mayo de 2014”. Por lo que respecta a la conducción autónoma, es un objetivo que Nissan se marca desde ahora hasta el 2020 y que se implementará en 3 fases: la primera será la que nos permitirá manejar los atascos en la carretera; con la segunda, nos moveremos con más seguridad por las autopistas y con la tercera y última fase nuestro vehículo afrontará de forma totalmente autónoma y segura las acciones más cotidianas de la conducción por ciudad, incluso las intersecciones o los giros.
En este sentido, Frank Torres ha explicado que “los vehículos que ya está comercializando Nissan actualmente ya llevan parte de la tecnología que permitirá, dentro de unos años, la conducción autónoma. Es decir, nuestra planta ya está produciendo vehículos que incorporan la tecnología fundamental para producir el vehículo del futuro”. El Consejero Director General y Vicepresidente de las Operaciones Industriales de Nissan en España ha matizado que “la conducción autónoma la debemos entender como la evolución natural de los vehículos que estamos fabricando actualmente y no como una revolución”.
Según Torres, “para conseguir la fábrica del futuro, es también imprescindible la inversión en investigación y desarrollo. El I+D tiene que ir asociado al proceso de fabricación. Invertir en mejorar los procesos, hacerlos más rápidos y más sencillos y que permitan aumentar, si cabe, la calidad de nuestros productos”. Es por este motivo que ha pedido “la colaboración de las administraciones. Si los gobiernos tienen claro que el futuro del tejido industrial pasa por garantizar tanto la innovación en procesos como la innovación en producto, conseguiremos poner unas bases sólidas a nuestra industria. Si no es así, siempre tendremos los pies de barro”.